Poner los limites es fácil, si sabes como

Poner límites es necesario y estamos todos de acuerdo que los niños necesitan disciplina.

 La mala conducta es fundamentalmente una demanda de atención.

El niño intenta sobrepasar los límites para  testar su creciente independencia., pero a la vez necesita sentirse controlado para sentirse seguro.

Como dice Magda Gerber  ( http://www.magdagerber.org/) :" la falta de limites no es bondad, es descuido y irresponsabilidad".

Esta autora indica 9 pautas para ponerlos en modo correcto. En este artículo os los iré resumiendo:

1) Empezar por la rutina diaria. Permite al bebé/niño de anticipar lo que nos esperamos de el, dando previsibilidad a las expectativas.

2) No tener miedo o tomar su mala conducta como algo personal. Cuando se proyectan estos miedos, el niño puede interiorizar la tensión aumentando su mala conducta. En lugar que poner etiquetas a las acciones, intentar cortar de raíz, desaprobando con indiferencia.

3) Contestar al momento, como si fueras un Jefe Ejecutivo con tono correcto, calmado, seguro, sin ningún esfuerzo. Los castigos, tus reacciones emotivas, los sermones no son claros i fomentan la culpa.

4) Hablar en primera persona es mas honesto y directo. No "mama quiere que" si no "yo quiero que": la relación comunicativa la tenéis tu y tu hijo, no otra persona!

5) No valen como trucos los aislamientos, los rincones para pensar y cosas de este tipo. Quieres aislarlo a la vida misma? Claro que no! Tampoco quieres humillarlo con un mensaje parecido a  " tu no existes". Sin embargo, va bien llevarlo a otro sitio para calmarlo, en caso de rabieta furiosa. Pero tu estas con el, manifestando tu disponibilidad y presencia.

6) Mirar a las consecuencias. Mas que el castigo que lo desconecta de la mala conducta, ofrecer contestas que apelan a la justicia: " Si tiras la comida, se acabó de comer", " Si no te vistes, no iremos al parque".

7) Llorar le hace bien. Anímalo a expresar sus contestas emocionales y  su frustración para no poder hacer lo que quiere en manera libre, sin que se sienta juzgado. Si lo necesita, ofrecele un cojín para que lo golpee fuerte!

8) Amor incondicionado. No retires tu cariño o hagas que el niño se sienta querido solo si hace lo que le pides. No vale " el " te quiero y te premio = haces lo que digo, contra el "no te quiero y te castigo = no haces lo que te digo. Esta formula genera rancor, desconfianza, risentimento.

9) No zurrar. Estropea la relación y anticipa comportamientos violentos. Causa dolor intencionalmente  que por lógica nada tiene que ver con el amor. Sin embargo un niño aprende a relacionar las dos cosas.

Querer no significa evitar los conflictos, si no convertirlos en  beneficio que ayuda a crecer.

Mas trucos que como educadora considero muy importantes a la hora de poner limites:

1) Felicitar la buena conducta. Es una manera para comunicar lo que nos esperamos y ofrecerles la oportunidad de practicarlo.

2) En lugar que insistir en lo que no tienen que hacer, mejor decirle lo que tiene que hacer. Siempre es mejor dar indicaciones positivas y en formula condicional, para que sea el mismo niño a decidir lo que tiene que hacer, sabiendo lo que puede pasar si no lo hace.

3) Anticipar los problemas!

4) Acompañar las indicaciones y  las ordenes con un juego agradable.

( cantando una canción, por ejemplo!)

5) Ofrecer alternativas y negociar.

En fin, se trata de explicar limites y reglas sin entrar en discusiones interminables; autorizar, sin ser excesivamente permisivos; querer sin dejarlo pasar todo; negar sin reñir; todo esto respectando su personalidad. Parece complicado pero no lo es!

Supongo que te estarás preguntando como puedo seguir todas estas indicaciones...

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