Jornadas pedagógicas Waldorf a la Casa degli Italiani

La pedagogía Waldorf responde a muchas inquietudes que vivimos como profesionales educativos. Aparece como una oasis de tranquilidad, frente a todo el estrés del hoy en día.








El Viernes pasado estuvimos a la primera jornada pedagógica Waldorf organizada por la escuela Waldorf el Tiller a Bellaterra, donde
escuchamos con mucho interés y paz la charla sobre el día a día en su sección infantil. Una documentación muy visual, emocional, sencilla, que nos ha gustado profundamente.

Aquí nuestra crónica, que esperamos os inspire tanto cuanto nos ha inspirado nosotras!


Nos quedamos con estas imagines: los niños limpiandose las manos con jabones naturales profumados, la magia de una vela para un momento especial, los niños disfrazados con telas, trepando arboles, saltando charcos, haciendo el pan y bebiendo agua esperando llegue su turno.

Nos parece un himno a la Pedagogía de la Salud , donde cabe la importancia de los 4 elementos naturales: agua, fuego, aire, tierra; donde el movimiento es la alegria de vivir y la recogida de los juguetes es una continuación misma del juego.
Apreciamos sumamente el concepto de escuela como casa, lugar donde ofrecer "pistas" para la autonomía.

Hay un ritmo que marcan tantos los Momentos de expansión " a fuera", como los de concentración "a dentro".
Su transición se crea con la música, de manera extremamente sutil (unas notas de xilofón o la flauta...).

Las manos y los juegos de dedos representan la estructura de cómo el niño aprende con el método Waldorf, resumida en estas frases:
"manos preciosas para hacer cosas hermosas", "dedos agiles, mentes ágiles".
Son cuentos cantados (con un hilo de voz en una melodía muy neutra) y danzado por las manos, que los niños aprenden practicando la psicomotricitad fina, el lenguaje, la concentración, la repetición...

El juego es totalmente libre tanto en la sala como en el jardín.
El aprendizaje, el juego, debe ser un proceso de conquista, nunca se avanza.

Las maestras cantan como ángeles, saben como reconducir un conflicto simplemente con sus voces calmas y sus gestos de acogida.
Mientras los niños juegan ellas van preparando nuevos materiales y observan.
Es un hacer y un mirar de verdad.
Es un aprender cada día algo nuevo sobre el niño.
....Como unas Mary Poppins :)!!!